Cuando intercedemos por alguien, estamos presentando sus deposición en presencia de Jehová y clamando por su intervención divina. El Espíritu Santo nos ayuda en este proceso al iluminar nuestras mentes, acorazar nuestros corazones y guiarnos en cómo orar efectivamente.1. Preparación: Inquirir un lado tranquilo y apropiado para la oración, do